A medida que nos adentramos en octubre, sabemos que se avecina un clima más frío. Esto significa que es hora de preparar tu coche para las próximas temporadas de otoño e invierno. Tu automóvil se verá afectado negativamente por las bajas temperaturas de muchas maneras.
El otoño es la temporada perfecta para preparar tu coche para el frío intenso que trae el invierno. El clima frío dificulta que los neumáticos mantengan el agarre y hace que el parabrisas esté más indefenso contra las grietas. ¿Qué puedes hacer para preparar tu vehículo para el descenso de las temperaturas?
Desde el Club 365 te traemos 10 consejos para preparar tu coche para el otoño:
1. Revisa las correas y los manguitos.
Busca grietas, fugas y desgaste en las correas y manguitos. Asegúrate de que no haya signos de división, deshilachado o vidriado. Un problema importante con las correas y manguitos defectuosos es el sobrecalentamiento. Aunque esto suele ocurrir en verano, puede ocurrir en cualquier época del año, incluso durante los meses más fríos. Si notas algún problema con estos componentes del automóvil, debes llevarlo a tu mecánico habitual.
2. Verifica los niveles de líquidos.
Es crucial reemplazar los niveles de líquidos del automóvil, según sea necesario. Esto incluiría líquido limpiaparabrisas, líquido de transmisión, refrigerante, líquido de frenos y líquido de dirección asistida. Todos son muy importantes para garantizar que tu vehículo funcione sin problemas. El líquido lavaparabrisas es importante para mantener la visibilidad. El líquido de transmisión es importante para la refrigeración. El refrigerante regula la temperatura del motor, mientras que el líquido de frenos sirve como lubricante, evitando la corrosión. El líquido de dirección asistida es crucial para operar el vehículo.
3. Revisa los neumáticos.
Verifica la banda de rodadura, el inflado y el estado general de los neumáticos. Rota las llantas, para que se desgasten uniformemente. Asegúrate de que las ruedas contengan la cantidad óptima de aire. Mantener la presión adecuada de los neumáticos es muy importante, porque el clima frío hace que los neumáticos pierdan aire rápidamente. Asegúrate de tener los neumáticos adecuados. Esta época del año viene con el potencial de la nieve y el hielo. Si vives en un lugar donde la nieve y el hielo son abundantes, necesitas neumáticos para nieve.
4. Prepárate para el clima frío.
Quedarse varado al costado de la carretera en cualquier época del año no es divertido. A medida que el clima se vuelve más frío, debemos estar especialmente preparados para una emergencia en la carretera. Estate preparado si se presentara una situación como esta. Equipa tu vehículo con los siguientes artículos (como ya te indicamos en nuestro blog):
- Manta térmica
- Kit de primeros auxilios
- Multiherramienta que incluya cuchillo
- Linterna y cargador o baterías
- Cables de arranque
- Cargador de teléfono y batería extra
- Pala
- Arena o arena para gatos
- Raspador de hielo
- Anticongelante
- Rasqueta
- Luz de emergencia
5. Revisa el aceite.
Cambia el aceite en el intervalo de cambio recomendado. Consulta el manual de tu vehículo para determinar el intervalo de aceite recomendado, ya que puede variar según el fabricante y los hábitos de conducción. Antes se recomendaba cambiar el aceite cada 5000 kilómetros. Sin embargo, esto ha cambiado debido a la construcción de motores modernos y al uso de aceite sintético. Si tu automóvil tiene un sistema de monitoreo de aceite, puedes usar este dispositivo como guía.
6. Controla el calor.
Verifica que la calefacción esté funcionando correctamente. No querrás estar sin ella cuando llegue el frío. Asegúrate de que el descongelador también funcione. Conducir con el parabrisas empañado es imprudente e inseguro. Si alguno de estos componentes necesita reparación, lleva el coche a tu taller habitual.
7. Revisa los frenos.
Es importante revisar los frenos antes de entrar en las temporadas de otoño e invierno. Los frenos son cruciales para una conducción segura. El clima frío aumenta los problemas de frenos, ya que las carreteras tienen el potencial de volverse resbaladizas debido a la nieve y el hielo. Escucha los ruidos inusuales que pudieran indicar fallos en las pastillas de freno.
8. Instala alfombrillas para todo el año.
Estas alfombrillas son duraderas para proteger el piso del coche contra el agua, la nieve, la suciedad y la mugre. Estas alfombrillas incluso protegerán tu coche de manchas y derrames. También hacen un buen trabajo para resistir el desgaste general. Puedes usarlas durante todo el año, no solo en los meses más fríos.
9. Verifica las luces.
Date un paseo por el exterior del vehículo. Verifica que todas las luces, incluidos los faros delanteros, las luces traseras, las luces de freno y las luces intermitentes, funcionen como deberían. Si es necesario, reemplaza una bombilla rota o fundida. Estas luces aseguran que otros conductores nos vean en la carretera, incluso con mal tiempo u otras condiciones donde la visibilidad es baja.
10. Verifica la batería.
Verifica la carga de la batería y signos de corrosión. Es recomendable llevarlo al taller para que lo diagnostiquen. La mayoría de las veces, esto no tiene coste. La batería es fundamental para arrancar tu vehículo.